Iniciativa, creatividad, emprendimiento

Información:
http://www.juntadeandalucia.es/educacion/webportal/web/cultura-emprendedora
http://planesyprogramased.wixsite.com/innicia
Desde que en 2011 se aprobara el Plan para el Fomento de la Cultura Emprendedora en el Sistema educativo Público de Andalucía, se han venido desarrollando una serie de acciones encaminadas a la promoción de los valores de la innovación, la creatividad, la responsabilidad y el emprendimiento.
En este curso, 2016-2017, se pone en marcha por primera vez el Programa Educativo Innicia Cultura Emprendedora para que en los centros educativos andaluces se trabaje el emprendimiento desde un punto de vista holístico, un programa que ayude a la formación del alumnado como ser creativo, innovador y emprendedor desde todos los ángulos y áreas pedagógicas.
La consideración del emprendimiento como una estrategia fundamental en la formación de las personas a lo largo de todo su periodo vital, nos lleva a considerar tres dimensiones en el emprendimiento: personal, social y productivo. De manera coherente con este planteamiento, se trataría de un modo de actuar y pensar orientado al:
- Emprendimiento personal: concretar el proyecto vital y encaminarse hacia su consecución de forma activa.
- Emprendimiento social: llevar a cabo iniciativas que repercutan en la mejora de la calidad de vida y el bienestar común.
- Emprendimiento productivo: crear riquezas y prosperidad en un marco sostenible y solidario.
Es por ello que la Consejería de Educación pone a disposición del profesorado andaluz una serie de herramientas para que se puedan fomentar estas tres dimensiones a través del desarrollo de las competencias emprendedoras: Autoconocimiento y Conocimiento, Creatividad y Creación, Imaginación, Grupo y Equipo y Responsabilidad, Comunicación, Comunidad y Bien Común, Iniciativa, Innovación y Aprendizaje, Productividad y Plan de Empresa y, por último, Asunción de Riesgos (gestión del fracaso).
Las sociedades actuales han ido asumiendo que el medio para auto-proveerse de bienestar es a través del estímulo de la iniciativa, del fomento de nuevas inquietudes y del contagio del famoso espíritu de superación. Si bien es verdad que esto es lo que nos define como especie, también es cierto que el desafío está en lograr alcanzar un bienestar ecológico y verdaderamente común.
Por todo ello, la educación con mayúsculas no puede obviar el emprendimiento como un fin en la formación de la ciudadanía.