Dentro del amplio legado histórico del que hoy puede presumir Andalucía, ocupa un lugar fundamental la que dejó la civilización íbera, que dejó su huella en buena parte de la Península entre los siglos VIII y I a.C., es decir, en la Edad del Hierro. Sus particulares creencias, su forma de entender el arte o su singular forma de concebir la organización en ciudades hoy se pueden ver gracias a los importantes yacimientos arqueológicos encontrados en toda la región andaluza. Sin embargo, donde esta cultura autóctona ha dejado más rastros es en la provincia de Jaén. No en vano, entre sus olivos hoy se conserva un amplio legado íbero que se puede conocer a través de una ruta que incluye antiguas fortalezas, templos o necrópolis.

Para poder adentrarse en el fascinante mundo de esta cultura estos días se brinda una oportunidad inmejorable, ya que hasta el próximo 5 de enero se celebra el ciclo ‘Escápate al Tiempo de los Íberos’. Visitas guiadas o teatralizadas y talleres de cerámica son algunas de las actividades incluidas en los distintos enclaves vinculados a la cultura íbera en la provincia de Jaén. Desde la capital se propone un amplio recorrido por localidades conservan importantes vestigios de esta civilización, comoLinares, Peal de Becerro, Ibros, Castellar, Torredelcampo, Porcuna o Vilches, entre otras.

Entre los yacimientos que mejor se conservan, se encuentra el ‘oppidum’ de Puente Tablas, situado a tan sólo siete kilómetros de la capital jienense. El viajero podrá adentrarse en esta antigua ciudad fortificada por el mismo sitio que lo hicieron los íberos.

Para complementar este primer acercamiento a la cultura íbera, conviene visitar el Museo Provincial de Jaén, que alberga una amplia colección del arte de esta civilización. Otro importante hito en esta ruta es el que se puede conocer en Linares, la antigua ciudad de Cástulo, que fue íbera antes que romana. Se trata de una de las grandes fortalezas de la época, ya que alcanzó una superficie de 70 hectáreas.

Entre los lugares de culto religioso de los íberos, el más interesante es el Santuario de la Cueva de la Lobera, situado en Castellar. Se trata de una gruta que aún conserva su magia, sobre todo en sus vínculos con el sol. Tiene una visita complementaria en el museo de la localidad, ya que se conservan algunas estatuillas vinculadas con las creencias íberas. Las murallas ciclópeas o las tumbas son otros hitos de este recorrido histórico por la provincia de Jaén.