Un profesor de Torreblanca se convierte en Napoleón, Velázquez o Cleopatra para conectar con sus alumnos durante el confinamiento
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Captar la atención de los estudiantes de ESO cuando no hay clases es difícil. Y más cuando se trata de adolescentes de Torreblanca, uno de los barrios más pobres de España y con mayor riesgo de exclusión. Por eso, Paco Pajuelo, profesor de Geografía e Historia de Secundaria y tutor de 2º de ESO en el Instituto Siglo XXI, decidió hacer algo para «enganchar»a sus alumnos al temario.
En su barrio no es fácil que los chicos sigan las clases telemáticas ya que la mayoría de los niños no tiene ordenador. Pajuelo le dio muchas vueltas a la cabeza. Hasta que se le ocurrió la idea de disfrazarse de los personajes históricos y utilizar las redes sociales para sus clases. «Si Mahoma no va a la montaña, la montaña irá a Mahoma», se dijo este profesor de 33 años que estaba «desesperado» por conectar con los estudiantes.
Se hizo una cuenta de Instagram y otra de TikTok, la red de moda entre los jóvenes, y se puso manos a la obra para que los chicos sigan aprendiendo. «Se trata de que sigamos con el vínculo», explica el profesor que cuelga en su cuenta, (sociales_xxi) vídeos disfrazándose de personajes históricos. El primero fue el 23 de abril cuando, para conmemorar el día del libro, se vistió de Benito Pérez Galdós. Tuvo tanto éxito que decidió seguir. Y «se hizo» un Velázquez.
Se ha transformado en Einstein, Napoleón Bonaparte, los Reyes Católicos, Calderón de la Barca, Cleopatra o el hombre de Atapuerca, entre otros, para explicar la historia. Les lanza un mensaje de dos minutos, en tono distendido e incluyendo bromas. Condensa mucha información de forma atractiva. Con ello les da su particular lección, sobre la que luego pregunta. Y consigue que los adolescentes aprendan.
De forma indirecta
«Mezclo explicaciones con cuestionarios de forma directa, divertida y breve», dice. De esta manera se asegura que les llega la información ya que, aunque los chicos no dispongan de portátil, sí tienen móvil. Como deben contestar, así comprueba si están aprendiendo. Es su particular manera de evaluarlos ya que sólo podrán responder si han visto esos vídeos.
Sus «apariciones» no sólo están teniendo éxito sino que les están sirviendo para que capten el mensaje.Cuando se disfrazó de Bethoven contó con la ayuda de una intérprete de lengua de signos que tradujo lo relataba. En todas sus apariciones conserva su bigote, su seña de identidad que «hace mucha gracia» a los niños.
«Cleopatra fue un pelotazo», dice entusiasmado en referencia al vídeo en el que se disfrazó de la reina egipcia. Con esta metodología les manda las tareas. Los disfraces los «apaña» con cosas de casa.
La peluca de Cleopatra se la hizo con lana. La cruz de Velázquez con una caja de cereales. Lo graba con el teléfono móvil y usa un trípode y flexos para iluminar la estancia. Ya ha comprado telas para sus próximas apariciones que suelen ser una sorpresa. Los alumnos están disfrutando. El también.